Una familia edificó un salón en memoria de su camión más querido

El vehículo acompañó a la familia de transportistas por 10 años.
Un cholet con detalles de un tractocamión se ha convertido en la atracción de la zona de Villa Mercedes A del Distrito 8 de El Alto. El inmueble es propiedad de la familia Quispe Sirpa, que tras siete años de construcción hizo realidad su sueño.
La inspiración para la obra fue un camión marca Volvo, de nombre Samurai, que por una década acompañó el “progreso” de la familia, según su propietaria Antonia Sirpa. Lamentablemente, el motorizado sufrió un accidente carretero en octubre de 2021 y quedó severamente dañado.
“El carrito se ha accidentado en una carretera de Perú y hemos llorado como si hubiéramos perdido a una persona, porque era impecable, trabajaba sin novedad; 10 años nos ha acompañado”, contó Sirpa a LA RAZÓN.
El cariño hacia el vehículo que les ayudó a llevar el sustento para su familia fue grande, por lo que, en agradecimiento, hoy su flamante salón de eventos lleva el nombre de Samurai, como llamaban al camión. La cabina del motorizado, suspendida en la parte central interna del local, forma parte del decorado.
“Nos va a seguir acompañando nuestro Samurai, por eso hemos puesto su cabina aquí dentro del salón. Esto no estaba en el proyecto, pero hemos dicho que no podemos olvidar al carrito azul. Le plasmaremos aquí en el salón, porque él también ha trabajado harto para construir la casa”, dijo la entrevistada.
La construcción tuvo algunos obstáculos por el factor económico, ya que la mano de obra y el material demandaron una inversión de al menos $us 800.000. No obstante, con arduo trabajo los Quispe Sirpa lograron financiar la obra que se inauguró el pasado 4 de junio con una singular fiesta.
“Nos hemos sentido felices al ver que lo hemos concluido, que nos ha costado mucho sacrificio y nos ha demorado mucho tiempo. Nos hemos estresado, pero hemos logrado ch’allar con varios grupos”, comentó.
Sirpa también contó que, en principio, el modelo del edificio era distinto. Sin embargo, el accidente de su vehículo más querido cambió el rumbo de la construcción. La familia tomó contacto con el arquitecto Víctor Paz, un prominente profesional alteño, quien diseñó el actual modelo.
“Nosotros le hemos mostrado un carro, le hemos dicho que queremos (el edificio) así. Entonces todos hemos aportado con ideas. Aunque inicialmente era otro proyecto muy simple, ahora ha quedado bien, como lo hemos soñado”, explicó.
Sirpa agregó que desde su niñez creció en medio de camiones, ya que su padre era transportista. En ese contexto conoció a su esposo Eugenio Quispe, quien es descendiente de una familia de igual oficio y con quien unió su vida hace 31 años.
TRABAJO
La familia empezó transportando estuco a Pando desde la provincia Pacajes de La Paz. Al principio contaba con un camión marca Scania y de a poco fue cambiando modelos de más capacidad de carga. En la actualidad, junto a sus hermanos y otros familiares, los esposos formaron una sociedad que se dedica a transportar carga desde Chile y Perú hacia el país.
Por lo pronto, y con más planes en la ruta de su vida, la prueba del éxito de la familia Quispe Sirpa es el imponente edificio ubicado en la avenida Estructurante de la zona Villa Mercedes A del Distrito 8, en El Alto.
Fuente: La Razón